Estimulación Temprana

Es una serie de actividades para desarrollar al máximo las capacidades físicas, intelectuales y afectivas del bebe con el objetivo de formar seres independientes y adaptados al medio. Es un mito pensar que solo beneficia a los niños con algún tipo de padecimiento, actualmente contamos con estudios que avalan la importancia que cada niño al  nacer tenga acceso a terapias para mejorar la maduración del sistema nervioso y el vínculo afectivo padres e hijos.

Cuando un niño se siente querido, apoyado y aceptado por su familia, se siente seguro, lo que le permitirá explorar el mundo. La Atención temprana proporciona apoyo a la familia que lo necesite, garantiza el cuidado médicoy  seguridad del niño, un entorno físico, afectivo y social óptimo.

 

 

La Estimulación temprana es tan indispensable para el desarrollo neurológico de los bebés como lo es el alimento .

La gran mayoría de las familias  aunque sean conscientes de la estimulación temprana,  desconocen aspectos esenciales de la estimulación. Uno de los aspectos importantes es que el crecimiento del cerebro depende de los estímulos que recibe.Las capacidades no se van adquiriendo simplemente con el paso del tiempo.

 

Las neuronas estimuladas indirectamente por el ambiente se mantienen y aumentan sus conexiones o sinapsis. Esta es la base teórica de la Estimulación Temprana del Niño. Las neuronas raramente estimuladas que no mueren, pierden sus conexiones. Este proceso se llama "reducción sináptica".

 

La corteza cerebral rodea al resto del cerebro. Es la estructura más grande del cerebro y en ella se almacena la inteligencia de nuestra especie. La corteza cerebral es la última estructura cerebral en parar de crecer. Por esta razón, se cree que es la parte más sensible a las influencias del ambiente durante el prenatal y los primeros años de la infancia. La corteza cerebral tiene muchas funciones específicas, como recibir información de los sentidos, instruir al cuerpo a que se mueva ;  responsable del pensamiento y de la conciencia. 

 

Además, los cambios físicos (sistema nervioso central, músculo-esquelético, etc.) se van produciendo en armonía con los cambios cognitivos, del lenguaje y de la capacidad de relacionarse con su entorno, lo que da paso a emociones y sentimientos. El desarrollo involucra siempre todos los aspectos de la vida humana: biológicos, psicológicos, emocionales, cognitivos y conductuales, que hacen posible la interacción con la sociedad y el ambiente.